lunes, 25 de febrero de 2008

TEMA

Muchos son los tipos de victimas generados por la violencia y la pobreza existentes en Colombia. Las personas afectadas por estos fenómenos sociales van desde jóvenes atracadores hasta campesinos exiliados de los municipios donde vivían. De todas estas personas, los desplazados y los desmovilizados son los que mayor atención reciben por parte del gobierno, los medios de comunicación y las ONG. La especial atención que se les presta a estos individuos se debe a su relación directa con el conflicto armado que vive el país, el cual es el tema prioritario del gobierno del actual presidente Álvaro Uribe.

Hasta el día de hoy, hay registrados aproximadamente 2’000.000 de desplazados y 20.000 reinsertados. A casi todos ellos se les ha brindado algún tipo de ayuda económica para que logren llevar a cabo un proceso de integración a la vida en las ciudades. Sin embargo, estudios de algunos psicólogos que han trabajado de cerca con estos individuos indican que muchas veces estas ayudas resultan insuficientes para dicho propósito. Esto ocurre por que estas personas no solo han sido afectadas económicamente, sino que también han experimentado sucesos que les han causado impactos psicológicos.


La perspectiva psicológica en el proceso de reinserción, desplazamiento y de adaptación a la vida en las ciudades no ha sido muy documentado. Esto produce que la sociedad colombiana y las entidades gubernamentales no sepan que es necesario ayudar a estas personas a superar sus problemas mentales y emocionales antes de intentar reintegrarlos a la sociedad. Muchos documentos y libros de investigación, como el “desplazamiento forzado en Colombia” de La defensoría del pueblo, abordan estos temas desde una perspectiva política. Sin embargo, son muy pocos los que intentan poner a un lado el conflicto armado para examinar a fondo como la guerra ha alterado la estabilidad mental de estas personas.


Esta falta de atencion a los problemas mentales y emocionales de los desplazados y reinsertados deja la gran incógnita de ¿Cómo los afecta la guerra psicológicamente?

OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL
Descubrir como el conflicto armado ha afectado la estabilidad psicologica de la poblacion desplazada y de los ex-combatientes de los grupos suversivos.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

1. Encontrar que tipos de traumas o trastornos psicológicos dejan los actos criminales y el exilio en la población desplazada.

2. Identificar los impactos psicológicos que la guerra ha dejado en la mente de los ex-combatientes de los grupos armados insurgentes.

METODOLOGÍA

1. Se buscara información de 2 personas que se vieron obligadas a desplazarse. Su identidad permanecerá anónima. Por otra parte, se consultara el libro "Desplazamiento forzado y reconstrucción de identidades" de Martha Nubia Bello, que describe detalladamente las implicaciones a nivel psicológico que la guerra y el desplazamiento mismo le traen a las personas. También se buscara información de los periódicos El Tiempo y El País para encontrar nuevos casos o investigaciones sobre los impactos psicológicos en los desplazados y la pagina Web "DDHH en Colombia".

2. Se buscara información de los libros "Impactos psicosociales de la participación de niños y jóvenes en el conflicto armado", por Sandra Ruiz Ceballos y "Reinsercion de guerrilleros ¿entrando en la casa del enemigo?" de Florentino Moreno Marín. Se consultara las paginas Web de la Presidencia de la Republica donde hay información sobre el estado de los guerrilleros antes y después de su desmovilización. También se examinara el documental "guerrillera girl" de Frank Piacequi , el cual muestra como son los retos que la guerra implica en sus combatientes y los cambios a nivel psicológico que exige.

RESULTADOS

Con este proyecto de investigación se pretende dar a conocer el grado de inestabilidad emocional y psicológica con la que los desplazados se movilizan a las ciudades. De esta forma la gente podrá comprender las causas de su comportamiento al llegar a las nuevas comunidades y como se les debe ayudar. Además se pretende concientizar a las organizaciones y la población civil de que tanto desmovilizados como desplazados, a pesar de estar afectados psicológicamente por traumas o desordenes emocionales, son personas con sensibilidad y dignidad.